
Te acuerdas cuando una tarde sentados en las banquitas de la universidad me dijiste que por mi te alejabas porque no querías sufrir más, yo con mi forma de ser te había encantado pero también con esta te había desencantado muchas veces y que no podríamos estar juntos ¿aun lo recuerdas verdad? Yo creo que si.
Pues ahora dime porque tú eres quien me busca, quien de nuevo comenzó hablarme y a citarme en mis días libres, diciéndome que necesitabas a alguien con quien conversar pero cuando nos veíamos solo me mirabas y te quedabas callada te acurrucabas en mi y se nos olvidaba el tiempo y todo alrededor y cuando me daba cuenta estaba acostado en una cama de hostal alado tuyo solo cubiertos por esa sabana toda arrugada después de toda una noche en donde la pasión quedaba corta. Cogías fugazmente al despertar tus cosas tiradas por el piso de la habitación y te vestías a una esquina de la cama sin siquiera voltear o dar un vistazo si aun seguían durmiendo, te delineabas los labios y te pintabas con ese labial sabor naranja que tanto me gustaba te revisabas en el espejo como ultima vez, abrías la puerta de la habitación y lentamente la ibas cerrando con cuidado de hacer un mínimo de ruido y asi terminaba un ciclo de algo en lo q aun no salimos.
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